viernes, 11 de mayo de 2007

Esclavo de sus propias palabras

No pude dejar de sorprenderme, aunque la verdad no hay mucho de lo que sorprenderse a estas alturas, cuando leí la declaración del arzobispo de Pamplona, Fernando Sebastián Aguilar, en las que decía a sus fieles que: “organizaciones como Comunión Tradicionalista Católica, Alternativa Española o Falange no pueden considerarse obligatorios, pero si dignos de apoyo”.

A este señor, por llamarlo de alguna manera, se le ha olvidado que, al menos en teoría, vivimos en un estado laico. Eso por no recordar que en el año 2003 el mismo Sebastián se enfrentó duramente con el Parlamento de Navarra cuando este hizo una declaración institucional en la que se nombraba a la iglesia, como uno de los responsable del fusilamiento, en 1936, de tres mil personas afines a las ideas republicanas.

Siento la tentación de poner a parir a esta criatura, quienes me conozcan un poco saben que me es muy difícil no ponerme como una fiera con este tipo de personajes. Pero me lo he prometido a mi mismo e intento, no como otros, ser consecuente con lo que digo, o en este caso me digo. Por eso, sin que sirva de precedente, no haré juicio de valor sobre este señor con sotana y dejaré que sea esclavo de sus propias palabras.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

¿La religión no era el opio del pueblo? Pues éste se ha debido fumar media India.

De todos modos, esto es una nimiedad, una anecdotilla ridícula. Lo importante es que coman el tarro a la gente y fomenten la extensión del SIDA en países menos avanzados porque oh, el condón es malo. Lo asqueroso es que no sepan ver o reconocer que da igual de qué sexo sea la persona que te guste.
Bueno, no voy a seguir, porque yo sí que me caliento y no tengo autocontrol ni coherencia.

Sra. Garrafa.

Anónimo dijo...

Al fin y al cabo la iglesia siempre se encuentra en la misma posición de conveniencia en la que se encontró durante toda la historia, los partidos que contemplen la doctrina dentro de sus planes, eson son los que merecen ser "dignos de apoyo", y mucho más dignos si se basan en unos principios de derechas como los de antaño.

El problema es que se le esté comiendo el coco a la gente, pero no es más que una opinión, tampoco es para poner el grito en el cielo, al menos esa es mi humilde opinión, no se va a hacer lo que este señor diga de modo que...

Gloria Avila

Anónimo dijo...

El problema es que no es una simple opinión, si fuese así, con obviarla tendríamos suficiente. El problema es que los de siempre hemos ido conquistando tierras y mentes, y hay gente que aún en estos tiempos sigue siendo temerosa de Dios. Si todo se relegase a ir a misa, a hacer donativillos para que sigan viviendo mejor, pues bueno. Lo malo es que con sus palabras no hacen más que alienar a muchas personas y determinan su comportamiento, y éste a su vez origina enfermedades mortales, exclusión de otras personas, intolerancia...y todo porque lo dice Dios.
No hace falta que machaquemos a los que tenemos más cerca. Miremos más al Este y veremos a los fanáticos del corán. Lapidar no es una opinión más. Tristemente, lo que ellos digan, va a Misa.

Sra. Garrafa, de nuevo :$

La Miss dijo...

Ahi queria llegar Sra. Garrafa, que cada quién piense lo que le de la gana, ahí no entro ni salgo. El problema con este tipo de gente es que, entre otras cosas, tienen mucho control en la educación de futuras generaciones, y eso me resulta preocupante. Quizá por eso pusieron el grito en el cielo cuando la ley de educación esa.
Está gente me preocupa, les temo...

Anónimo dijo...

No había llegado yo ahí Sr. Garrafa, no había pillado la intención de Mcfly, personalmente en el tema de la religión me he visto muy cerrada durante mucho tiempo, por lo que agradezco versiones como las que estoy leyendo ahora.

Me iba a poner a discutir, pero viéndolo desde otro punto de vista creo que teneis mucha razón, aunque sigo pensando que no todo hay que llevarlo al extremo.

Un saludo a ambos
Gloria Avila